La conducción de la guerra es una ciencia que se sustenta en principios y leyes; y es un arte, porque es una actividad libre y creadora. 
En la guerra moderna, prevalece la incertidumbre, el caos, en situación normal; las armas se  destacan por su tecnología y la conducción de la batalla impone conocimiento, flexibilidad, rapidez mental e iniciativa a los Comandantes en todos los niveles.